Reclamo de la ciudadanía portuguesa AURORA

[Jayme Fucs Bar]

El Parlamento portugués aprobó la legislación para facilitar la naturalización de los descendientes de los judíos del siglo XVI que huyeron debido a la persecución religiosa.
La moción, presentada por los socialistas y el Centro de partidos de derecha, se leyó el jueves en el Parlamento y fue aprobada por unanimidad el viernes como una enmienda a la portuguesa “Ley de Nacionalidad”.
Permite a los descendientes de judíos que fueron expulsados en el siglo XVI convertirse en ciudadanos si “pertenecen a una comunidad sefardí de origen portugués con lazos con Portugal”, según comentó José Oulman Carp, presidente de la comunidad judía de Portugal.
Los solicitantes deben ser capaces de demostrar “apellidos sefardíes”. Otros factores que influyen es “el idioma que se hable en casa”, una referencia que también se aplica a los ladinos. La enmienda también dice que los solicitantes no necesitan residir en Portugal, una excepción al requisito de los seis años de residencia consecutiva en Portugal para cualquier solicitante de la ciudadanía.
“El siguiente paso es la creación de un marco burocrático para revisar las solicitudes,

lo que probablemente involucre a la comunidad judía de Lisboa y a los funcionarios del gobierno”, dijo Carp, que ha presionado desde hace varios años por la enmienda a la que considera “un gran avance”.
La Inquisición portuguesa comenzó en 1536 y dio lugar a la expulsión masiva y forzada conversión al cristianismo. Portugal tenía una población judía de cerca de 400.000, muchos de ellos refugiados de la vecina España, donde la Inquisición comenzó en 1492.
Carp, espera que la medida ayude a atraer a nuevos miembros a la comunidad judía del país. “Espero que la modificación atraiga algún interés de los miembros de la comunidad judía de Turquía, país que absorbió muchos inmigrantes portugueses”, dijo.
El apoyo popular a la moción se debe a un deseo de “hacer las paces” con un capítulo oscuro en la historia de Portugal, un país al que Carp describe como “prácticamente libre de antisemitismo.” Algunos también esperan que la ley pudiera atraer inversiones de los judíos buscado asentarse en Portugal, una de las economías más vulnerables de la Unión Europea.